En una operación del SEPRONA, se detectó consumo fraudulento en pozos ubicados en Las Pedroñeras, Villarrobledo y Daimiel.
La Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) ha descubierto la manipulación de contadores volumétricos instalados en captaciones de aguas subterráneas en las provincias de Ciudad Real, Albacete y Cuenca. Mediante diferentes procedimientos, principalmente el uso de imanes, se ha llegado a robar un total de 400 millones de litros de agua.
Durante la última semana, la CHG, en colaboración con el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, llevó a cabo una operación en el marco de las actuaciones de control y vigilancia del dominio público hidráulico. Según un comunicado emitido por la CHG este lunes, la manipulación de caudalímetros fue detectada en los municipios de Villarrobledo, Las Pedroñeras y Daimiel, en la zona del Alto Guadiana. Estos acuíferos deberían abastecer de forma natural el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, siendo uno de ellos detectado en los Ojos del Guadiana, el lugar histórico donde vuelve a manar el río Guadiana.
La CHG ha señalado que la manipulación de caudalímetros se ha convertido en una práctica extendida en el territorio, con consumos fraudulentos que superan entre cuatro y cinco veces los derechos de agua que tenían estos regantes. El robo de «un bien tan escaso y tan necesario para el desarrollo socioeconómico del Alto Guadiana» se estima en más de 400 millones de litros, lo que equivale al consumo anual de una población como Mota del Cuervo (Cuenca).
El organismo de cuenca ha recordado que estos actos pueden constituir un delito contra el medio ambiente y los recursos naturales, con sanciones que pueden superar los 70.000 euros y conllevan la tramitación de las extinciones de los derechos al uso del agua de estos aprovechamientos.
La Ley de Aguas establece que los titulares de concesiones administrativas de aguas, tanto subterráneas como superficiales, y aquellos con derecho a su uso privativo, deben instalar y mantener sistemas de medición que garanticen información precisa sobre los caudales de agua consumidos o utilizados. Los caudalímetros facilitan información esencial para respetar los derechos existentes, medir el volumen de agua realmente utilizado, permitir la correcta planificación y administración de los recursos y asegurar la calidad del agua. La CHG ha advertido que actuaciones como las detectadas suponen un incremento inaceptable de las extracciones en masas de agua subterránea que se encuentran sobreexplotadas, poniendo en peligro importantes ecosistemas y la viabilidad del resto de explotaciones agrícolas. La confederación ha hecho un llamamiento a los usuarios del agua para que hagan un uso racional y eficiente de este recurso vital para la vida y la actividad económica.