A pesar de pequeñas incidencias el de este año supera con creces al 2022
08/04/2023 – RM Noticias. Cuenca
La procesión de El Camino del Calvario fue una de las más destacadas de la ciudad de Cuenca desde hace años. Varias personas calificaron que ayer se vivió mucha vistosidad, energía y acompañamiento a pesar del frío temporal.
El año pasado, muchos calificaron el Camino del Calvario como histórico, posiblemente impulsados por el entusiasmo generado tras cinco años sin ver la procesión terminar de desfilar. Se afirmó que nunca más se vivirían unas Turbas como las presenciadas en 2022, y se pensó que la procesión de la madrugada de Cuenca del año pasado sería difícil de igualar.
Sin embargo, se demostró que estaban equivocados, ya que, en 2023, el evento del año anterior solo sirvió como un aperitivo para la impresionante procesión que los turbos y nazarenos habían planeado para este año.
Con la eliminación total de las restricciones, se ha observado una notable participación en las celebraciones. Desde las extensas filas de tulipas en las tres hermandades hasta el ensordecedor avance de la turba, que progresaba paso a paso tanto por el asfalto del centro urbano como por el empedrado del Casco Antiguo, sin causar los retrasos característicos de años anteriores.
A pesar de ciertos momentos de tensión minutos antes del comienzo de la procesión, se consiguió construir el espacio donde comenzaría aquello que todos esperaban: la bienvenida a Nuestro Padre Jesús Nazareno y de seguido a Jesús Caído y la Verónica. El día que los ciudadanos definen como el más importante de Cuenca, religiosamente hablando, llegaba con el amanecer de ayer junto escenas repletas de luz de las tulipas y las velas.
Según fuentes periodísticas, el alcalde de Cuenca destacó que «Prácticamente no ha habido incidencias y seguimos con esa tónica. Una única incidencia en la Plaza Mayor, donde un nazareno sufrió un desmayo mientras participaba en las filas. Antes de entrar en San Juan, el desfile se detuvo por unos minutos para que el nazareno fuera atendido por la Cruz Roja, ubicada en el Ayuntamiento, y posteriormente fue trasladado al hospital antes de iniciar la bajada.
Según se informó, el nazareno recuperó el conocimiento poco después de desmayarse durante la procesión y aparentemente se encontraba bien. Sin embargo, por precaución, fue llevado en ambulancia al centro hospitalario de la capital.
A pesar de este incidente, la madrugada transcurrió prácticamente sin problemas, con «todas ellas insignificantes, como algún traslado al hospital, pero prácticamente nulas las incidencias», señaló Dolz.
La vistosidad se hizo con la mañana gracias a la música que las bandas acompañaban al unísono las marchas y a las coloridas túnicas, superando así la del año pasado.