La violencia se intensifica con más de 5,200 fallecidos en Gaza y 1,400 en Israel desde el inicio del conflicto.
El conflicto entre Israel y Hamás ha alcanzado niveles críticos tras el inesperado ataque lanzado por el grupo militante desde Gaza el pasado 7 de octubre. Los enfrentamientos han dejado un devastador saldo de 5,087 muertos en Palestina, debido a los intensos bombardeos israelíes que han visto un alarmante incremento, con un total de 320 ataques en el último día, una cifra tres veces mayor que la de días anteriores. Este aumento se produce como respuesta al ataque de Hamás que causó la muerte de 1,400 israelíes, informó la ONU.
En un gesto que Hamás describe como «humanitario», cuatro de los más de 220 rehenes, incluyendo dos ciudadanos estadounidenses y dos israelíes, han sido liberados. Paralelamente, la frontera de Ráfah se ha abierto por tercer día consecutivo, permitiendo el paso de 17 camiones cargados con ayuda humanitaria. Sin embargo, la ONU advierte que esta medida es insuficiente dadas las urgentes necesidades de los habitantes de Gaza, quienes enfrentan condiciones cada vez más desesperadas bajo el asedio.
La situación en la región sigue siendo tensa y volátil, con una escalada de violencia que ha provocado pérdidas significativas y un profundo sufrimiento humano. La comunidad internacional, alarmada, sigue instando a ambas partes a un alto al fuego inmediato y a la reanudación de las negociaciones para evitar más pérdidas de vidas inocentes.
