El heroico gesto de un albaceteño que salvó la vida a dos personas en una playa de Alicante
Dos hombres fallecieron el pasado viernes, 7 de junio, en la playa de ‘La Roqueta’ de Guardamar del Segura, en Alicante, mientras intentaban rescatar a dos bañistas arrastrados por la corriente mar adentro. Entre los rescatadores se encontraba Carlos Ferrer, un joven de Albacete, quien puso en riesgo su vida y llegó a la orilla en condiciones extremadamente difíciles.
Seis personas que estaban en la playa, incluido Ferrer, acudieron al rescate cuando los bañistas pidieron auxilio. Lamentablemente, dos de los rescatadores fallecieron, y los demás resultaron heridos y fueron trasladados al hospital. Carlos Ferrer, originario de Fuenteálamo, Albacete, y vecino de esta localidad, estaba en Alicante para pasar unos días de vacaciones con su familia, pero terminó ingresado en la UCI debido a las secuelas del complicado rescate. Aunque ya se ha recuperado, continúa luchando contra una infección respiratoria causada por una bacteria del agua ingerida durante el rescate.
Ferrer explicó a El Digital de Albacete que, el viernes, cuando vio a dos personas pidiendo ayuda, no dudó en lanzarse al mar junto con otras cinco personas para ayudar a los bañistas, a pesar de las condiciones peligrosas del mar. Desafortunadamente, dos de los rescatadores, un británico y un polaco de entre 40 y 50 años, perdieron la vida.
A pesar de ser una zona costera, las condiciones climáticas eran adversas, y según el propio Ferrer, «había un fuerte temporal y el estado del mar era peligroso». Ferrer fue atendido en el lugar por médicos del SAMUR y posteriormente trasladado al hospital, donde ingresó en la UCI debido a su delicado estado de salud tras el incidente.
Ferrer relató que los bañistas se habían adentrado en el mar a pesar de las advertencias, y la fuerte corriente los arrastró. En ese momento, seis personas en la playa acudieron al rescate con un flotador y una cuerda. Ferrer recordó que «lo complicado fue a la vuelta, fuimos a rescatarlos sin pensarlo, pero el mar estaba muy mal y dos de los seis que fuimos perdieron la vida. Uno de ellos iba a mi lado».
Carlos, que no tiene conocimientos de socorrismo, confesó que «se lanzó al mar sin pensar», pero «lo complicado fue salir. Tragamos mucha agua, fue horroroso». Tras pasar más de 24 horas en la UCI, aún se está recuperando de las secuelas. «Los médicos dijeron que llegué en muy mal estado, pero me han cuidado muy bien», destacó.
A pesar del trágico desenlace, el acto de valentía y generosidad de Carlos Ferrer y las otras cinco personas que participaron en el rescate demuestra un altruismo extraordinario. Este incidente pone de manifiesto la importancia de la prudencia en el mar y la necesidad de contar con servicios de socorrismo durante todo el año en zonas costeras.
El comienzo del verano ha sido trágico para las playas alicantinas, con varios casos de personas heridas o fallecidas por ahogamiento. En particular, en la playa de ‘La Roqueta’, cuatro personas han fallecido en pocos días, subrayando la peligrosidad de las corrientes y la necesidad de precaución.