El humo y el olor insoportable del incendio en San Antonio de Requena hacen volver las mascarillas FFP2 a las calles.
Las mascarillas FFP2, que durante mucho tiempo fueron símbolo de la pandemia de coronavirus, han regresado a las calles de Requena y San Antonio de Requena debido al incendio que está devastando una planta de residuos en esta última localidad. Desde el lunes, los vecinos de estos municipios deben lidiar con una densa nube de humo y un olor a plástico insoportable, según describe Montse, residente de San Antonio.
A pesar de seguir las recomendaciones de la Conselleria de Medio Ambiente y el ayuntamiento, como evitar el deporte al aire libre y usar mascarillas FFP2, el olor persiste incluso dentro de las viviendas. «Las ventanas están cerradas, pero el olor penetra igualmente», explica Montse.
La intensidad del olor varía con la dirección del viento. Mientras que en San Antonio disminuye ocasionalmente, en Requena aumenta. Algunos vecinos incluso usan mascarillas dentro de sus hogares debido a la angustia que les provoca el hedor.
Este no es el primer incendio que afecta a la planta, según relata Montse. Sin embargo, la magnitud actual del fuego es preocupante. Los residentes temen que el incendio dure varios días más, especialmente debido a los más de 100.000 metros cúbicos de plástico almacenados en la planta.
Aunque el fuego está controlado, no puede extinguirse completamente debido a la naturaleza altamente combustible de los materiales presentes, como plásticos y cartones. Los bomberos continúan sus esfuerzos, pero las llamas persistirán hasta que se eliminen todos los residuos almacenados.